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KAY PACHA que en aymara es AKA PACHA, significa “esto es aquí”, el estar presente en el aquí y ahora.

Este encuentro, es el resultado de un proceso de experiencias progresivas obtenidas a lo largo de un camino misional, es un hermanamiento a partir de una visión global que es común entre los seres humanos de todas las culturas, que no es otra cosa que el sentimiento de encauzar la vida humana hacia otra dirección. Sabiendo que los sistemas globales han entrado en crisis con la necesidad de replantearse otros paradigmas y en el caso de nuestros pueblos originarios, adentrarnos en los mensajes que ellos nos dejaron, para extraer experiencias que son las herramientas indispensables para salir hacia una dirección, más ecuánime y equilibrada con la creación, con la tierra y con todos los seres con los que compartimos planetariamente.

El recorrido por el camino rojo de la sabiduría de nuestros ancestros Tiwanakotas “el Amawtismo”, que emerge de la Escuela Filosófica Amawtica Universal de Choque P’ajcha, con sede en Tiwanaku. Plantea propuestas para compartir comunitariamente con hermanos de muchos pueblos y países, permitiendo de este modo construir puentes, ejerciendo una consciencia de unidad planetaria entre los humanos, desterrando en un movimiento de limpieza de patrones, el patrón de la “diferencia racial”, logrando de este modo un acercamiento equilibrado de culturas y saberes, que pueden ser una fuente importante primigenia de abrazos y puentes interculturales, que permitan mirarnos a todos los seres humanos solo a partir de nuestro origen primigenio, como hijos del Dios Universal (Wiñay Jakiri) e hijos de la Pachamama, en una progresión muy parecida al de la whiphala, donde ningún color tiene prevalencia.

Este encuentro intercultural, nos permite interactuar con hermanos y hermanas provenientes de otras culturas y civilizaciones, que han visto una propuesta en los saberes ancestrales andinos. La participación y la presencia de personas que han tomado el camino de la alternatividad a partir de una evolución interior nos permite arribar a un encuentro de identidades y sentimientos comunitarios que son la característica común inherente a todos los que participarán en este encuentro.

La necesidad de limpiarnos de creencias y de la influencia ideológica antigua para retomar otro camino, es la que estará presente en este ejercicio que no tiene otro objetivo que el de compartir desde el corazón con la simpleza de quien solo desea comunitarizar sus mejores sentimientos, que son el atributo de las personas enraizadas.

También está destinado a fomentar el reconocimiento, la valoración y difusión de la Sabiduría y prácticas de nuestros Ancestros Tiwanakotas, que aún perviven a través del Amawtismo, como una filosofía o forma de vivir que da origen al Suma Qamaña.

Este encuentro es el tercer proyecto de siembra de una semilla que es necesario que prospere a lo largo del tiempo y el espacio, para que podamos celebrarlo con personas que aman a la Pachamama (Madre Tierra).

Amawta Fernando Ergueta
Mensajero de los Andes